El replanteo inicial de las dos primeras hiladas de ladrillos ayudará a definir la modulación del muro a construir. Entre otros aspectos, permitirá verificar el espesor de la llaga (cantería vertical) definida en el proyecto, a la vez que se podrá ubicar los cortes a mitad u otros cortes especiales que la construcción del muro requiera.
Realizados estos pasos se asegura una traba homogénea en todo el muro, canterías uniformes y se verifica además la coincidencia de los tensores de refuerzo con los huecos de los ladrillos, para así evitar el desplazamiento por doblado de barras o cortes inadecuados para la inserción en tensores.